
Estas zapatillas me han acompañado en muchos momentos importantes de mi historia, si no trascendentales, al menos divertidos. Fiestas, conciertos, excursioncillas... Me acuerdo el dia que me las regalaron, fue la mañana de reyes del 2007, no me las esperaba, y mi madre como siempre me sorprendió con una caja misteriosa. Yo no me esperaba más que mi dosis habitual de literatura navideña (siempre me regalan libros, por navidad, por reyes por mi cumple etc...). Pues bien, toda emocionada abri el paquete y en cuanto descubri las converse me faltó tiempo para quitarme las zapatillas de andar por casa y calzarmelas.
Vinieron a la Fervenza, a las 24 horas, a un sin fin de verbenas, jugue al futbol con ellas, dos noches de San Xoán con sus dias, muchas salidas por el monte de Romaris, Santa Comba, Noia, Londres, Candem Town, Paris, Rouen, Gisors Authevernes, Roma, Vaticano, Venecia...
Las llevé calzadas muchas primeras veces, le quedan unas pocas, no quiero que se acaben, pero me pasaré el verano sin quitarmelas de los pies, justo como el año pasado. Mis converse tendran una vida digna ^^
Sinrazón, odiosa diosa...